África

Me enamoré de África la primera vez que oí hablar de ella. ¿Animales en libertad corriendo a su antojo? ¿Enormes sabanas? ¿Naturaleza por doquier? Yo creía que todo eso era cosa de libros y fábulas que hablaban de lo que una vez fue el hombre... ¿Como pensar que aún exisitía algo de todo eso? Si mi vida era mi casa, mi calle, mi colegio, mi parque... y todos los animales que había visto había sido en zoológicos o circos. Me quede ensimismada... desde entonces aún sigo en esa especie de trance cada vez que escucho hablar de África.
Me duele el alma, muy profundamente, cada vez que escucho que se está muriendo. Que la estamos matando nosotros, los blancos, los "primermundistas". Se me destroza el corazón. ¿Realmente creeis que el mundo avanza? ¿Eso es avance? Descubrir leyes físicas más antiguas que la vida misma a costa de destrozarlo todo... ¡Bah! Puta la hora en la que el hombre se creyó superior a su naturaleza y renegó de ella. Lo peor de todo no es la muerte de África, que algún día llegará irremediablemente, sino la forma y el motivo de ella, la manera en que África se está muriendo. No me quiero imaginar el día que eso llegue. Rezaré para que mis ojos no alcancen a ver ese momento... será el fin de toda esperanza.
Y mientras tanto en mi celda... sigo soñando con la libertad y la armonía que sólo un continente como África podría darme. Imaginándome mil viajes por su inmensa riqueza, conociendo el gran abanico de culturas que en ella habitan.
Amo África... y es lo único que amo en este mundo maldito... junto con algunas tierras perdidas que aún se salvan del virus llamado "Humanidad" y que se están muriendo lentamente.
Desde mi celda... una lágrima por las últimas gotas de esperanza que aún le quedan a este sucio mundo, manchado por nuestras propias manos.
2 comentarios:
Hay mucha esperanza repartida en otros lugares de esta tierra. Hay miradas entre otras muchas miradas que guardan tras sus pupilas ansias de libertad, sueños y anhelos de cambios.
En Cádiz, por ejemplo, hay una mirada que transmie ganas de vivir, de luchar.
una mirada que me ha robado mucho más de lo que la dueña de esos ojos puede imaginar.
con gente como tú, Marta, las cosas pueden mejorar. Sólo hay que creerselo. creetelo.
Así que yo era el único que se había metido con tus ojos....
Te vas enterando ya? Avanti Marta.
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio